Smoker anuncia a sus marines que pronto llegará un barco para recogerles y llevar prisioneros a Caesar, Baby 5 y Buffalo junto a Barbamarrón, que decide ir a prisión y ser curado. Luffy y Sanji lloran al ver que Kinemón se ha hecho pedazos, pero éste de repente se recompone y finalmente se reúne con Momonosuke.
Law por su parte ha comenzado a tratar a los niños y pronto se curarán, entregándolos a la Marina para que los devuelvan a sus hogares. Nami confía en Tashigi puesto que le recuerda a Bellemere y sabe que los devolverá sanos y salvos. Sanji ha cocinado un plato que aprendió en la isla de los okama para todos. Momonosuke se niega a comerlo pero su padre le dice que esos piratas son de fiar y puede comer y mantienen una conversación que alarma a Sanji. Finalmente se monta una fiesta (que hace enfadar a Law, quien quiere desaparecer de Punk Hazard) durante la misma, Law mantiene una conversación con Smoker, el cual le pregunta por qué se ha aliado con Luffy y su tripulación. Law le cuenta que su intención es derrotar al Yonkou "Kaido de las 100 Bestias"...
Finalmente sabemos quién es el Yonkou al que se enfrentará la alianza Law/Luffy, el único Yonkou que todavía no ha hecho aparición en el manga. El resto del capítulo sirve a modo de conclusión de una saga que parece que todavía no ha dado su último coletazo y parece que todavía le queda un cartucho reservado para el final.
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