El estreno de esta serie basada en el libro de G.R.R. Martin del mismo título ha sido una de las grandes apuestas de esta temporada. Para aquellos que no conozcan nada de los libros, el primer episodio puede servirles como introducción.
La historia se desarrolla en un continente ficticio denominado Westereos (Poniente en versión española) que está dividido en siete reinos. A lo largo de la serie veremos las tramas políticas en las que se ve envuelta la familia Stark, protagonista en esta primera entrega, cuando reciben una inesperada visita.
En el primer episodio ya se avanzan varias cosas del libro por lo que todo apunta a que el ritmo de la serie va a ser bastante rápido. La verdad es que espero que en los próximos capítulos se tranquilicen un poco porque hay muchos personajes (algo característico del libro) y muchos detalles que enriquecen la historia y sería una lástima que se perdieran. En este sentido, creo que la relación de Daenerys (Emilia Clarke) con su hermano Viserys (Harry Lloyd) no se ha retratado con mucha justicia y es importante para la trama.
En general, el capítulo cumple las expectativas de una lectora (o lector) de las novelas, como es mi caso. La ambientación está muy lograda así como los personajes, como el momento de Jaime y la ventana o la relación entre Catelyn y Jon Nieve. Si hiciera algún comentario negativo, sería que el papel de Tyrion (Peter Dinklage) no me ha convencido mucho. Espero que en el capítulo siguiente vaya a mejor.
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