La nueva serie de TNT producida por Steven Spielberg, Falling Skies, ha sido uno de los estrenos más esperados de la semana. El domingo 19 se estrenó en EE.UU y ayer lo emitió en España la cadena privada TNT. Para aquellos que estén esperando su emisión en abierto, Telecinco ha confirmado la compra de Falling Skies pero sin fecha de emisión.
La introducción a la serie es bastante buena ya que desde un primer momento se pone al día al espectador de todo lo que ha pasado. En estos primeros minutos un niño cuenta la historia de la invasión alienígena a partir de dibujos, lo que permite ver cómo los más pequeños sobrellevan la situación.
En cuanto a la historia principal, Falling Skies pretende presentar un relato coral en el que el protagonismo se reparta entre varios personajes aunque sin duda la figura principal es la de Tom Mason (Noah Wyle), un profesor de Historia que participa activamente en la resistencia contra los alienígenas al tiempo que cuida de su familia.
La serie combina escenas de acción con momentos en los que se intentan ahondar en la psicología de los personajes. En este sentido, una de las líneas principales de la trama va a ser la búsqueda de uno de los hijos de Tom, Ben, que ha sido capturado por los extraterrestres.
Precisamente los alienígenas y el misterio de su llegada y comportamiento, son otra de las líneas a partir de la cual se desarrollará la serie. La estética que se ofrece de los Skitters (extraterrestres de seis patas) es bastante aceptable pero creo que la de los Mechs (robots alienígenas) resulta poco creíble. Supongo que han hecho lo que han podido con el presupuesto.
Uno de los puntos fuertes de la serie es que intenta reflejar problemas que van más allá de la lucha contra los invasores como el conflicto entre el ejército y los civiles, los problemas de insubordinación, los rescates etc. Espero que en capítulos posteriores sigan explotando estaperspectiva.
Por otro lado, hay dos cosas que no me han gustado y que (por suerte) no afectan a la trama principal, o eso espero. En primer lugar están las escenas que buscan conmover al espectador a partir de los niños. Es cierto que son el grupo que más sufre las consecuencias de la invasión (los alienígenas parecen muy interesados en ellos) pero no hay que abusar de estas escenas o, al menos, no emplearlas tan al principio de la serie. En segundo lugar, hay una cosa que me saca de quicio y es que los "malos" lo sean porque no tienen nada mejor que hacer. En el segundo episodio aparece una banda de forajidos de este tipo que, si bien sirve de detonante para otros acontecimientos, restan credibilidad.
En definitiva, es una serie que puede dar mucho de sí. Esperaremos a ver en qué sentido avanza.
Hasta ahora esta serie ha sido muy decepcionante para mí; pero tiene buen potencial y espero que mejore...
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