3 jul 2011

Transformers. El lado oscuro de la Luna.


Año: 2011

Duración: 157 min.

Director: Michael Bay

Guionistas: Ehren Kruger

Reparto: Shia LaBeouf, Rosie Huntington-Whiteley, John Malkovich, Josh Duhamel, Patrick Dempsey, John Turturro, Frances McDormand, Ken Jeong, Peter Cullen, Tyrese Gibson, Kevin Dunn, Alan Tudyk, Lester Speight

Sinopsis: En esta tercera entrega de la saga Transformers, los Autobots y los Decepticons se ven envueltos en una peligrosa carrera espacial en la Tierra entre los EE.UU. y Rusia, donde un acontecimiento amenaza con provocar una guerra tan grande que ni los propios transformers puede que sean capaces de salvar nuestro planeta. Y una vez más, como casi siempre, Sam Witwicky se encuentra involuntariamente en medio del conflicto. (FILMAFFINITY)

Comentarios: "¿Con qué nos quedamos? ¿Efectos especiales o argumento?", debieron preguntarse los productores.
El final de la historia es obvio. Invirtieron tanto en lo primero que no quedó para lo segundo, por lo visto.
El nivel de espectacularidad visual de la cinta es brutal, impresionante. Lástima que sea una capa muy gruesa de maquillaje que no consigue enmascarar un vacío argumental que hace plantearse si vale la pena ir a ver este tipo de películas por muy interesantes que prometan ser.
He oído que los espectadores la califican como la mejor de las tres. Yo la definiría como "más".
En la cinta hay más personajes, vemos más combates, más explosiones, más robots y es más absurda que sus predecesoras aunque en definitiva es más de lo mismo.
Por lo demás, es hija de Michael Bay, es decir, un clon de obras anteriores suyas en las que la distinción entre buenos y malos está clara desde un principio y pocas cosas sorprenden más allá de los momentos clímax en que los buenos salvan el mundo, el chico salva a la chica o tópicos semejantes que terminan habitualmente con un contrapicado ensalzando a los personajes en cuestión.
Para más inri, ni siquiera la banda sonora está a la altura de una película de este tipo en que lo que entra por ojos y oídos es más importante que el contexto de la película en sí.
Hablando de lo que entra por los ojos, hay que reconocer que la ausencia de Megan Fox está suplida por Rosie Huntington-Whiteley que, si bien su personaje es más absurdo que Jason Statham en una biblioteca, cumple su papel a la perfección como florero de la película.
En resumen; huid de ella.

1 comentario:

  1. No puede ser peor que la segunda xD

    Si era mas anuncio de hasbro y del ejercito usa que una pelicula xD

    Salen aviones? claaaro que siiiii :D

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